Haba

Las habas son un cultivo que forma parte de la agricultura mediterránea desde la Edad de Hierro. En la Grecia antigua eran muy apreciadas y las ofrecían al dios Apolo. Los egipcios comían habas y las cultivaban desde antiguo. Al parecer, se dice que algunos sacerdotes muy supersticiosos, no se atrevían a mirarlas por considerarlas inmundas. Pitágoras, instruído por estos egipcios, prohibía el uso a sus discípulos y, añade, que prefirió que le matasen los que le perseguían atravesando un campo de habas. Aristóteles da en favor de esta prohibición varias razones, de las cuales la menos infundada es aquella en la cual el filósofo se propuso un precepto moral que prohibía a sus discípulos que se mezclasen en asuntos de gobierno, fundándose en que el escrutinio en las elecciones se hacía vulgarmente con habas. Cicerón indica (De divinatione) que esta prohibición se fundaba en que el haba caliente irritaba los espíritus y no permitía al alma poseer la calma necesaria para la indagación de la verdad. También se supone que fueron prohibidas por un principio de castidad, por su similitud con cierta parte del miembro viril. Algunos añaden que fue por razones santas y misteriosas, que los pitagóricos no revelaban a nadie; de modo que, según Jámblico dice de ellos, hubieran preferido morir antes que revelar el secreto. Un pitagórico se cortó la lengua temiendo que la fuerza del tormento le arrancase la verdad. Las habas, principalmente las negras, constituían una ofrenda fúnebre. Se creía que en la sustancia de ellas residían las almas de los muertos, y que se parecían a las puertas del infierno. Festo supone que sobre la flor de esta legumbre se ve una marca o señal lúgubre. La costumbre de ofrecer habas a los muertos, era una de las razones por la que Pitágoras prohibía a sus discípulos el que las comiesen. Las habas formaban parte de la dieta israelita; ocasionalmente, sobre todo en épocas de hambre, se mezclaban con grano en la elaboración de un pan basto. El haba común (vicia faba) sigue siendo muy usada en Palestina. )o( MITOLOGÍA.- Trasilo, citado por Estobeo, dice que en el Nilo se hallaban unas piedrecitas muy parecidas a un haba, que tenían la propiedad de echar a los espíritus malignos en el momento que se aplicaban a la nariz de los poseídos.
 
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