Zorobabel
o Zer-babili o Zerubbabel (siglo VI a.C.). Vástago de la estirpe regia de David y líder, junto con el sacerdote Josué, de la primera expedición de exiliados judíos que abandonaron Babilonia para restaurar Jerusalén. La reconstrucción de la historia del retorno no resulta sencilla, pues las principales fuentes (fundamentalmente Esdras y Nehemías) son excesivamente confusas y contienen numerosos errores. Con todo, está claro que el rey persa Ciro, que conquistó Babilonia en el 538 a.C., animó a los judíos a que regresaran a Jerusalén y se llevaran consigo las vajillas de oro y plata que Nabucodonosor había robado del Templo, con la expectativa de que, una vez en su tierra, podrían gozar de tolerancia religiosa y de una cierta autonomía política. La expedición de Zorobabel, formada por levitas, benjaminitas y judaítas, no fue bien recibida por las tribus que habían permanecido al oeste del Jordán, en especial, una vez que Zorobabel rechazara el ofrecimiento que le habían hecho para ayudar a la reconstrucción de la ciudad y el Templo. Estas tribus informaron al rey de Babilonia de que Zorobabel tenía la intención de reinstaurar un reino independiente en Judá, pero el monarca, tras consultar los archivos oficiales, declaró que lo realizado por Zorobabel contaba con la aprobación regia y que, por lo tanto, podía continuar con su tarea. Apoyados por los profetas Ageo y Zacarías, Zorobabel y Josué siguieron adelante, pero, a la altura del fin de siglo, la empresa parecía haberse venido abajo. Esdras y Nehemías serían los encargados de retomarla.