Haaibre Ápries
(ss. VII-VI a.C.). Faraón del Período Saíta (desde el 664) y de la Dinastía XXVI (672-525), que reinó entre 589-570. En egipcio Haaibra-Uahibra. Hijo y sucesor de Neferibre Psamético II. Importante influencia helénica. Con barcos tripulados con marinos griegos, ocupó la isla de Chipre, a unas 250 millas al norte del Delta. Disturbios políticos internos contra los usurpadores. Reocupó Palestina y Sidón, aliado de Sedecías de Judá. Nabucodonosor II reaccionó inmediatamente, bloqueando Tiro y asediando Jerusalén (587). Un ataque egipcio en ayuda de los judíos fue un fracaso y no pudo impedir la toma y destrucción de Jerusalén por los babilonios (586). Acogió a los judíos que habían escapado al saqueo de Jerusalén (587), en la colonia de Elefantina, fundando otras colonias en Egipto. Tiro, sostenido por la flota egipcia, resistió 13 años. La ayuda de Ápries demuestra lo importante que era para Egipto la independencia de la metrópolis fenicia, su principal proveedora de materias primas tan importantes como la plata y el bronce. La resistencia fue inútil y finalmente Etbaal III, último rey de Tiro, se rindió a Nabucodonosor II (573). Los problemas de Ápries no acabaron aquí y tuvo que volver su atención a Libia, donde los griegos de Cirene, al expansionarse, amenazaban la independencia de los libios y la frontera occidental de Egipto. Ápries se alió con el rey libio Adrikán. No atreviéndose a mandar a sus mercenarios griegos contra otros griegos, envió un ejército de tropas indígenas, pero fue derrotado en Irasa y se vió obligado a realizar una retirada desastrosa a través del desierto. El desastre militar provocó una reacción nacionalista y xenófoba que acusó a Ápries de enviar exclusivamente a soldados egipcios a una campaña contra Cirene que se sabía peligrosa, salvaguardando a los soldados griegos. Apries se vió obligado a utilizar al general Ahmés o Amasis para reducirlas; pero éste le traicionó y se hizo proclamar rey. Tras una serie de incidentes, la guerra civil entre Apries y Amasis se resolvió en la batalla de Momenfis (570), en la cual murió Apries. Sus restos, sin embargo, fueron sepultados con todos los honores fúnebres en Sais por parte del usurpador. De Apries nos ha llegado una sola escultura (Cabeza del Museo del Louvre, en granito negro) y otras atribuidas. Construyó diferentes obras en Athribis, Menfis y Sais, de las que apenas han quedado algunos restos. Es el faraón Kofra o Hofra de la Escritura.