Zacarías
(siglo VI a.C.). El undécimo de los profetas menores. Al igual que Ageo, apoyó con toda su energía a Zorobabel y Josué durante el retorno a Jerusalén tras el Cautiverio babilónico y, posteriormente, en la tarea de reconstruir el Templo y restaurar su culto. Tuvo la visión de un nuevo orden mundial y de un Mesías sin nombre que traería la paz universal. El libro de Zacarías contiene algunos fragmentos (no anteriores al siglo V a.C. y, posiblemente, aún más tardíos) que no son sino una desagradable diatriba, llena de odio hacia los pueblos vecinos, muy en la línea de una mentalidad "proapartheid". Estos capítulos (donde se encuentra la mención al precio de 30 piezas de plata que luego recogería el Nuevo Testamento) constituyen un ejemplo de cómo fue degenerando el papel del profeta con el transcurso del tiempo, hasta abandonar la exhortación religiosa y moral, por el más cerril y rencoroso chauvinismo. Ver, Profetas.