Zoología

El origen de la vida y del hombre en particular atrajo el interés de los griegos desde los primeros tiempos. La creencia de que el hombre y otros animales nacieron de la tierra se encuentra con frecuencia en la mitología griega. Sin embargo el desarrollo de la filosofía natural jonia introdujo actitudes racionales en los relatos del origen de la vida en una fecha temprana, cuando Anaximandro planteó la teoría de que las primeras criaturas vivientes, encerradas en membranas con pinchos, surgieron de una humedad primigenia evaporada por el sol. En los testimonios doxográficos que registran las ideas de Anaximandro los estudiosos han encontrado premoniciones de las teorías de adaptación al entorno, la supervivencia de los mejor adaptados y de la evolución de las especies. Pero aunque su intuición de que las primeras criaturas vivas tenían que haber tenido incialmente alguna protección para ocupar el lugar que normalmente ofrecen los padres es muy imaginativa, en ello no se justifica la afirmación de que sus teorías anticipan la moderna doctrina evolucionista. Anticipaciones similares se han encontrado en el pensamiento de Empédocles, pero aunque se puede esperar encontrar justificadamente aquí una teoría de la supervivencia de los mejor adaptados, cualquier clase de pensamiento evolucionista es el resultado mecánico de su sistema físico general. No existe una línea directa de evolución genética de los organismos más especializados a partir de prototipos primitivos a través del mecanismo de la herencia. Una anticipación más fiable de Darwin se puede ver en el tratado hipocrático De Genitura, De Natura Pueri / De Morbis 4 que, indudablemente por influencia de Demócrito, plantea una teoría de la pangénesis sensiblemente similar a sus "Variaciones de animales y plantas en condicciones de domesticación". Se puede decir con alguna justificación que, con la excepción de este trabajo, la zoología antigua comienza y termina con Aristóteles. El más importante de sus tratados zoológicos es la Historia de los animales, en nueve libros, Sobre la generación de los animales, en cinco libros, Sobre las partes de los animales, en cuatro libros, Sobre el movimiento de los animales, un libro y Sobre el avance de los animales, un libro. Estos trabajos, que presentan una gran riqueza de observaciones (se mencionan más de 500 especies animales), exactitud de las descripciones y ordenamiento y clasificación cuidadosos, establecen los fundamentos de la zoología sistemática para los siguientes dos mil años.
 
Volver